Conseguir que un gato use una cama nueva puede ser un verdadero desafío. Aunque a muchos tutores les encanta comprar camas cómodas y adorables para sus gatos, los felinos suelen preferir cajas de cartón o lugares inesperados. Sin embargo, con algunos trucos y entendiendo las preferencias de tu gato, es posible ayudarlo a aceptar y disfrutar su nueva cama. En este artículo, te explicamos cómo hacer que tu gato use su nueva cama de forma voluntaria y feliz.
Por qué los gatos rechazan camas nuevas
Los gatos son criaturas de hábito y apego a su entorno. Las razones más comunes por las que un gato ignora o rechaza una cama nueva son:
- Olor extraño: Las camas nuevas tienen olores de fábrica o de tienda que pueden resultar incómodos.
- Ubicación inadecuada: Si la cama está en un lugar ruidoso o de mucho tránsito, el gato la evitará.
- Tamaño o forma incorrecta: Algunos gatos prefieren camas cubiertas, mientras que otros disfrutan de superficies planas y abiertas.
- Cambio brusco: Si el gato tiene un lugar favorito para dormir, forzarlo a cambiarlo puede generar rechazo.
Elige una cama adecuada
Antes de presentar la cama nueva, asegúrate de que sea adecuada para tu gato:
- Tamaño: Lo suficientemente amplia para que el gato pueda estirarse o acurrucarse cómodamente.
- Forma: Algunos gatos prefieren camas tipo cueva, otros prefieren colchonetas o camas elevadas.
- Material: Suave y acogedor, pero fácil de lavar.
- Estabilidad: La cama debe estar en una superficie firme y no moverse cuando el gato entre.
Observar dónde y cómo duerme tu gato actualmente te dará pistas sobre sus preferencias.
Cómo presentar la nueva cama
1. Introduce la cama con el olor familiar de tu gato
Frota un paño suave por el cuerpo de tu gato y pásalo por la cama nueva. También puedes colocar una manta o prenda que ya tenga su olor. Los gatos se sienten más seguros en espacios que huelen a ellos mismos.
2. Ubica la cama en un lugar estratégico
Coloca la cama en un lugar donde tu gato ya suele descansar. Los gatos prefieren dormir en lugares altos, cálidos y tranquilos, alejados de corrientes de aire y ruido. Si el gato prefiere dormir cerca de una ventana o en un rincón específico, coloca la cama allí.
3. Usa premios y refuerzos positivos
Coloca snacks o juguetes dentro de la cama para despertar la curiosidad de tu gato. Cuando entre o se acerque, felicítalo con caricias suaves o palabras amables. No lo fuerces a entrar.
4. Haz la cama parte de su rutina
Si tu gato tiene un horario regular de descanso, coloca la cama en su sitio favorito justo antes de esas horas. Si el gato asocia la cama nueva con momentos de tranquilidad, será más probable que la adopte.
5. Juega cerca de la cama
El juego es una excelente forma de crear asociaciones positivas. Juega cerca de la cama para que el gato la investigue mientras se divierte. Incluso puedes usar juguetes para guiarlo suavemente hacia la cama.
Dale tiempo
Algunos gatos adoptan camas nuevas en cuestión de horas, mientras que otros necesitan días o incluso semanas. Es normal que al principio el gato ignore la cama o la huela con desconfianza. Lo importante es no forzarlo y dejar que se acostumbre a su ritmo.
Evita moverla constantemente
Si encuentras una ubicación donde el gato muestra interés por la cama, déjala allí. Moverla de un lado a otro puede confundir al gato y hacer que la rechace.
Cuida la limpieza de la cama
Lava la cama periódicamente, pero sin eliminar completamente el olor familiar. Evita detergentes con perfumes fuertes, ya que pueden resultar desagradables para tu gato. Idealmente, combina mantas o cobertores lavables para mantener la cama limpia sin perder el olor familiar.
Si tu gato prefiere otro lugar, respétalo
Algunos gatos eligen dormir en lugares inesperados, como cajas de cartón, estantes altos o incluso en tu cama. No es necesario obligarlos a usar una cama nueva si ya tienen un lugar favorito. En ese caso, simplemente puedes colocar la cama nueva cerca de su lugar habitual para que la explore libremente.
Un proceso de paciencia y observación
Cada gato es diferente y tiene sus propias preferencias. Lo más importante es observar su comportamiento, respetar su espacio y utilizar refuerzos positivos para crear una experiencia agradable. Con tiempo, paciencia y algo de creatividad, tu gato aprenderá a disfrutar su nueva cama.