Existe un mito muy común que dice que los gatos no pueden ser entrenados como los perros. Sin embargo, la realidad es muy diferente. Los gatos pueden aprender comandos y responder a señales si el entrenamiento se realiza con paciencia, consistencia y métodos adecuados.
Una de las habilidades más útiles (y sorprendentes) que puedes enseñarle a tu gato es venir cuando lo llamas. Esto no solo fortalece el vínculo entre ustedes, sino que también puede ser muy útil en situaciones de seguridad o emergencia.
En este artículo te explicamos cómo enseñarle a tu gato a venir cuando lo llamas, paso a paso, de forma positiva y efectiva.
¿Por qué enseñar este comportamiento a tu gato?
Muchos piensan que los gatos solo hacen lo que quieren, pero la verdad es que les gusta interactuar con sus humanos, especialmente cuando la experiencia les resulta positiva.
Enseñarle a tu gato a acudir a tu llamado puede ser útil para:
- Llamarlo a casa si tiene acceso al exterior.
- Evitar que se esconda en situaciones de estrés.
- Facilitar el momento de alimentarlo, cepillarlo o medicarlo.
- Fortalecer la comunicación y confianza mutua.
Y, por supuesto, ¡sorprender a tus visitas con un gato que responde cuando lo llamas!
¿Los gatos entienden su nombre?
Sí, diversos estudios han demostrado que los gatos pueden reconocer su nombre. Incluso pueden distinguirlo de otras palabras similares. Sin embargo, reconocerlo no significa que siempre responderán, especialmente si no asocian el llamado con algo positivo.
Por eso, la clave está en crear una asociación agradable y constante entre el sonido de su nombre (o de tu voz) y una experiencia que al gato le guste.
Paso a paso: Cómo enseñarle a tu gato a venir cuando lo llamas
🐾 Paso 1: Elige la palabra o sonido de llamado
Puedes usar:
- Su nombre habitual.
- Un sobrenombre cariñoso que ya asocie contigo.
- Un sonido especial, como un clic, un chasquido de lengua o el ruido del bote de premios.
Lo importante es ser constante: usa siempre el mismo sonido para que pueda asociarlo claramente.
🍗 Paso 2: Usa refuerzos positivos
El método más efectivo para entrenar a un gato es mediante el refuerzo positivo: recompensarlo con algo que le encante cuando hace lo que tú esperas.
Los mejores reforzadores para este ejercicio son:
- Snacks o premios especiales.
- Comida húmeda.
- Caricias suaves (si a tu gato le gustan).
- Juguetes interactivos.
💡 Consejo: Reserva los premios más sabrosos solo para el entrenamiento, así tendrán más valor.
🏠 Paso 3: Empieza en un lugar tranquilo
Comienza el entrenamiento en un espacio sin distracciones. Llama al gato cuando esté cerca, usando el sonido o nombre elegido, y muéstrale el premio inmediatamente.
Repite este proceso varias veces. Lo ideal es que:
- Te vea mientras lo llamas.
- Asocie el sonido con la recompensa.
- Empiece a anticipar el premio al oír su nombre.
Haz sesiones cortas (5 a 10 minutos) y termina siempre con una experiencia positiva.
🔁 Paso 4: Aumenta la distancia poco a poco
Cuando tu gato entienda que venir a ti significa recibir algo bueno, puedes empezar a llamarlo desde otra habitación o cuando esté ocupado.
- Llama con tu voz o el sonido elegido.
- Si viene, felicítalo y dale su recompensa de inmediato.
- Si no responde, no lo fuerces ni lo persigas. Intenta de nuevo más tarde o reduce la distancia.
La clave está en la repetición y la paciencia.
🎮 Paso 5: Refuerza con regularidad
El entrenamiento debe repetirse varias veces por semana, incluso después de que el gato ya haya aprendido. Si dejas de practicar, es posible que pierda el hábito.
También es recomendable:
- Variar el lugar del entrenamiento.
- Pedirle que venga en diferentes horarios.
- Recompensarlo siempre que responda correctamente.
Errores comunes al enseñar este comportamiento
Evita estos errores frecuentes para no entorpecer el proceso:
❌ Usar el nombre para regañarlo
Si llamas a tu gato y luego lo bañas, lo llevas al veterinario o lo castigas, asociará el llamado con algo negativo. Intenta evitar el nombre en situaciones estresantes.
❌ Forzarlo a venir
Si lo tomas a la fuerza o lo obligas a salir de su escondite, perderá la confianza. El entrenamiento debe basarse en su voluntad, no en imposición.
❌ Llamarlo constantemente sin recompensa
Si lo llamas y no pasa nada bueno, aprenderá a ignorar el llamado. Asegúrate de premiar su respuesta, aunque solo sea con una caricia o palabras suaves.
Consejos adicionales
- Sé paciente: algunos gatos aprenden en pocos días, otros en semanas.
- Observa su personalidad: los gatos más curiosos suelen responder más rápido.
- Adapta el refuerzo a su gusto: no todos los gatos valoran lo mismo.
- No compares con perros: el aprendizaje felino tiene otro ritmo.
¿Y si no funciona?
Si tu gato no responde después de intentarlo varias veces:
- Revisa si está motivado (¿tiene hambre? ¿le gusta el premio?).
- Reduce las distracciones del entorno.
- Usa sonidos más suaves o distintos.
- Consulta con un etólogo felino si quieres orientación personalizada.
Sí, tu gato puede venir cuando lo llama
Enseñar a tu gato a responder a tu llamado es totalmente posible si usas las herramientas adecuadas: refuerzo positivo, repetición y respeto por su personalidad.
Ahora que sabes cómo enseñarle a tu gato a venir cuando lo llamas, puedes comenzar un entrenamiento divertido y útil que mejorará la comunicación entre ustedes y hará que tu gato confíe aún más en ti.
Recuerda: no se trata de obediencia, se trata de cooperación basada en confianza y afecto. Y cuando veas que corre hacia ti al oír tu voz, sabrás que todo el esfuerzo valió la pena.