El juego es una parte fundamental en la vida de un gato. No solo les proporciona ejercicio y entretenimiento, sino que también les ayuda a desarrollar habilidades instintivas y fortalecer su vínculo con sus tutores. Sin embargo, algunos gatos pueden morder con demasiada fuerza mientras juegan, lo que puede resultar doloroso y problemático.
Es importante recordar que los gatos no muerden por maldad o agresividad, sino porque es parte de su forma natural de jugar. No obstante, es posible enseñarles a controlar su mordida y redirigir este comportamiento de manera positiva. En este artículo te explicamos por qué los gatos muerden durante el juego y qué hacer para corregirlo sin recurrir a castigos.
¿Por qué los gatos muerden mientras juegan?
Los gatos utilizan la boca y las garras cuando juegan porque están imitando sus comportamientos naturales de caza. Sin embargo, hay varias razones por las que un gato puede morder con más intensidad de lo esperado:
- Instinto de caza
El juego en los gatos es una forma de practicar la caza. Cuando persiguen, atrapan y muerden juguetes, están simulando la captura de una presa. Si no tienen juguetes adecuados, pueden recurrir a morder manos o pies.
- Falta de socialización temprana
Los gatitos aprenden a controlar la fuerza de su mordida jugando con sus hermanos y su madre. Si un gatito es separado demasiado pronto de su familia, puede no haber aprendido a moderar la fuerza de su mordida.
- Sobreexcitación
Algunos gatos se emocionan demasiado durante el juego y muerden más fuerte de lo necesario. Esto puede suceder cuando juegan de manera intensa sin pausas.
- Asociación incorrecta
Si un gato ha aprendido que morder las manos es parte del juego (por ejemplo, si le has permitido jugar con los dedos desde pequeño), seguirá haciéndolo porque cree que es aceptable.
- Frustración o aburrimiento
Un gato que no recibe suficiente estimulación puede acumular energía y descargarla de manera brusca al jugar. La falta de actividad física y mental puede llevar a un comportamiento más agresivo.
Cómo evitar que tu gato muerda durante el juego
- Nunca uses las manos como juguetes
Uno de los errores más comunes es jugar con los gatos usando las manos o los dedos. Aunque pueda parecer inofensivo cuando son pequeños, esto les enseña que es aceptable morder la piel humana.
En su lugar, usa juguetes diseñados para gatos, como:
• Cañas con plumas o cintas.
• Ratones de peluche.
• Bolas pequeñas.
• Juguetes interactivos.
Cuanto más se acostumbre a morder juguetes en lugar de manos, mejor.
- Detén el juego si muerde
Si tu gato te muerde con demasiada fuerza, sigue estos pasos:
1. Detén inmediatamente la interacción.
2. Emite un sonido corto de queja (“¡ay!”) para imitar la reacción de otro gato.
3. Retira lentamente la mano sin movimientos bruscos.
4. No castigues ni grites, simplemente ignóralo unos segundos.
Esto le enseñará que si muerde con demasiada fuerza, el juego termina.
- Usa juguetes adecuados para la caza
Para satisfacer su instinto cazador sin que muerda tus manos, ofrece juguetes que imiten presas en movimiento:
• Juguetes que ruedan o rebotan.
• Ratones mecánicos o de peluche.
• Pelotas con sonido.
Los juguetes interactivos que se mueven solos también pueden ayudar a redirigir la mordida.
- Redirige la mordida a un juguete
Si tu gato intenta morderte, ofrécele inmediatamente un juguete para que muerda en su lugar. Puedes tener uno cerca cada vez que juegues con él.
- No premies la mordida involuntariamente
Si cada vez que tu gato muerde le hablas o le prestas atención, puede aprender que morder es una forma de obtener interacción. En lugar de reaccionar, ignóralo unos segundos y redirige su atención a un juguete.
- Evita castigos o respuestas agresivas
Nunca:
• Le grites o asustes.
• Le empujes o golpees.
• Le rocíes agua o lo castigues físicamente.
Estas acciones solo generan miedo y empeoran su comportamiento.
- Juega con tu gato todos los días
Los gatos necesitan mínimo 15 minutos de juego activo diario. Esto les ayuda a liberar energía y evita que muerdan por aburrimiento o exceso de energía acumulada.
• Realiza varias sesiones de juego cortas.
• Utiliza juguetes que lo hagan correr, saltar y perseguir.
• Alterna los juguetes para evitar el aburrimiento.
Un gato cansado es menos propenso a morder de forma agresiva.
- Refuerzo positivo: premia el buen comportamiento
Cuando tu gato juegue sin morder o use juguetes en lugar de tus manos, refuérzalo positivamente con:
• Snacks o premios.
• Caricias y elogios.
• Un rato extra de juego divertido.
Esto ayuda a que relacione el buen comportamiento con una recompensa.
- Observa si hay señales de agresividad real
Si tu gato muerde no solo durante el juego, sino que muestra:
• Bufidos o gruñidos.
• Cola erizada.
• Ataques sin provocación.
Podría estar experimentando estrés, miedo o problemas de salud. En estos casos, consulta con un veterinario o etólogo felino.
¿Qué hacer si mi gato ya tiene el hábito de morder?
Si tu gato ya ha aprendido a morder durante el juego, cambiar el comportamiento tomará tiempo y consistencia. Algunas claves para corregirlo incluyen:
• Redirigir la mordida a un juguete cada vez que ocurra.
• Evitar reforzar el comportamiento con atención involuntaria.
• Mantener una rutina de juego activa.
• No castigarlo, sino enseñarle alternativas.
Si eres constante, con el tiempo entenderá que morder las manos no es parte del juego.
El juego es una parte fundamental en la vida de un gato, pero es importante establecer límites para que sea seguro y respetuoso. Con paciencia, refuerzo positivo y estrategias adecuadas, puedes enseñar a tu gato a jugar sin morder y fortalecer el vínculo con él de una manera sana y divertida.