Muchos tutores de gatos no lo saben, pero uno de los principales desafíos en la salud felina es lograr que el gato beba suficiente agua a diario. Debido a su naturaleza, los gatos tienden a consumir menos líquidos de lo necesario, lo que puede llevar a problemas urinarios graves, como infecciones, cristales en la orina y enfermedades renales. Por eso, saber cómo hacer que su gato beba más agua y evitar problemas urinarios no solo es importante, ¡es esencial para su bienestar!
En este artículo, te daremos consejos prácticos y efectivos para estimular el consumo de agua en tu gato y prevenir complicaciones de salud a largo plazo.
¿Por qué los gatos no beben mucha agua?
A diferencia de los perros, los gatos descienden de animales del desierto y han evolucionado para sobrevivir con poca agua. En la naturaleza, obtienen la mayor parte del líquido que necesitan de sus presas, como pequeños roedores o aves, que contienen un alto porcentaje de agua.
Esto significa que los gatos domésticos no suelen sentir tanta sed, especialmente si se alimentan con pienso seco, lo cual puede resultar en una hidratación deficiente si no se estimula el consumo de agua de manera adecuada.
Consecuencias de la baja ingesta de agua
Cuando un gato no bebe suficiente agua, su orina se vuelve más concentrada, lo que puede llevar a:
• Infecciones urinarias.
• Formación de cristales o cálculos en la vejiga.
• Cistitis idiopática felina.
• Enfermedades renales crónicas.
Estas afecciones no solo afectan la calidad de vida del gato, sino que pueden requerir tratamientos costosos o, en casos graves, intervenciones quirúrgicas.
¿Cuánta agua debe beber un gato al día?
Un gato sano debería consumir entre 50 y 70 ml de agua por cada kilo de peso corporal al día. Por ejemplo, un gato de 4 kg debería beber entre 200 y 280 ml de agua diariamente. Sin embargo, esta cantidad puede variar si el gato consume comida húmeda (que ya contiene un 70-80% de agua) o seca.
Cómo hacer que su gato beba más agua
A continuación, te mostramos estrategias prácticas y seguras para fomentar el consumo de agua en tu gato y así evitar problemas urinarios:
1. Ofrécele comida húmeda
Una de las formas más efectivas de aumentar la hidratación de tu gato es incluir comida húmeda en su dieta.
• Patés, mousses y sobres contienen una alta proporción de agua.
• Puedes mezclar comida húmeda con croquetas si tu gato no está acostumbrado.
• Incluso puedes añadir una cucharada de agua tibia a la comida para aumentar su contenido líquido.
Esto es especialmente útil si el gato no bebe por sí solo.
2. Coloca varios bebederos por la casa
Muchos gatos no beben suficiente agua simplemente porque no tienen fácil acceso a ella. Prueba lo siguiente:
• Coloca varios recipientes de agua en diferentes lugares de la casa.
• Asegúrate de que estén alejados de la caja de arena y de su comida.
• Prefiere lugares tranquilos y donde el gato pase tiempo.
Así, tu gato encontrará agua en diferentes momentos del día y será más probable que beba.
3. Usa fuentes de agua para gatos
A los gatos les encanta el agua en movimiento. Una fuente especial para gatos puede ser una excelente inversión:
• Mantienen el agua oxigenada y fresca.
• El movimiento estimula su curiosidad.
• Muchos gatos beben más si ven el agua fluir.
Además, suelen incluir filtros que ayudan a mantener el agua más limpia.
4. Cambia el recipiente de agua
El tipo de bebedero también influye. Algunos gatos rechazan ciertos materiales. Prueba con:
• Cerámica o acero inoxidable: no retienen olores.
• Evita el plástico: puede alterar el sabor y acumular bacterias.
Además, asegúrate de que el recipiente sea amplio y poco profundo, para que sus bigotes no toquen los bordes (esto puede incomodarlos).
5. Mantén el agua siempre limpia y fresca
Los gatos son muy exigentes con la higiene del agua. Cambia el agua:
• Al menos una vez al día.
• Limpia el recipiente con agua caliente y jabón neutro.
• En verano, incluso más veces al día.
Una buena práctica es colocar cubitos de hielo en el agua para mantenerla fresca en climas cálidos.
6. Añade sabor al agua
Algunos gatos se sienten atraídos por ciertos olores. Puedes añadir:
• Un poco del agua de cocción del pollo sin sal ni condimentos.
• Unas gotas de agua de atún natural (no aceite).
Esto hará que el agua les resulte más apetecible. Sin embargo, hazlo ocasionalmente y asegúrate de no alterar su dieta principal.
7. Observa y adapta
Cada gato es único. Algunos prefieren agua tibia, otros fría. Algunos prefieren el agua recién servida, otros después de un rato. Observar sus preferencias es la mejor forma de lograr que beban más.
¿Cuándo consultar al veterinario?
Si tu gato bebe muy poco, orina poco o con dificultad, o muestra signos de dolor, es fundamental consultar con un veterinario. Estos pueden ser síntomas de problemas urinarios que requieren atención inmediata.
Además, si notas que tu gato de repente bebe mucha más agua de lo normal, también puede ser señal de enfermedad renal o diabetes.
Saber cómo hacer que su gato beba más agua y evitar problemas urinarios es clave para una vida larga y saludable. Pequeños cambios en su rutina, en el tipo de comida o en la presentación del agua pueden marcar una gran diferencia en su bienestar.
Recuerda que un gato bien hidratado es un gato con menos riesgo de infecciones, cálculos urinarios y enfermedades renales. Con amor, observación y constancia, puedes convertir el hábito de beber agua en algo natural y agradable para tu felino.