Viajar con un gato puede ser un desafío, ya que la mayoría de los felinos son animales de rutina y territorio. Sin embargo, con la preparación adecuada, es posible hacer que la experiencia sea más cómoda y segura tanto para el gato como para su tutor. Ya sea un viaje corto al veterinario o un trayecto largo en coche o avión, seguir algunas estrategias clave puede marcar la diferencia. En este artículo, te explicamos cómo viajar con tu gato sin estrés y de forma segura.
Preparativos antes del viaje
- Acostumbra a tu gato al transportín
El transportín es el elemento más importante para viajar con tu gato. Si tu gato no está familiarizado con él, es probable que se sienta ansioso y se resista a entrar. Para evitar esto:
• Deja el transportín abierto en casa varios días antes del viaje.
• Coloca dentro una manta con su olor y algunos premios o juguetes.
• Haz que entre voluntariamente sin forzarlo.
• Realiza pequeños paseos en coche con el transportín para que se acostumbre.
Un gato que asocia el transportín con experiencias positivas viajará con menos estrés.
- Visita al veterinario antes del viaje
Si el viaje es largo o tu gato tiene problemas de ansiedad, consulta con el veterinario para:
• Revisar su estado de salud.
• Actualizar vacunas (si es necesario).
• Preguntar sobre sedantes o feromonas si tu gato se estresa demasiado.
Algunas aerolíneas también requieren certificados veterinarios antes del vuelo.
- Empaca un kit de viaje para tu gato
Lleva contigo lo necesario para garantizar la comodidad de tu gato durante el trayecto:
• Transportín seguro y cómodo.
• Manta con su olor para reducir el estrés.
• Comida y agua.
• Caja de arena portátil.
• Juguetes o rascador pequeño.
• Toallitas húmedas y bolsas de limpieza.
Viajar con tu gato en coche
Si viajas en coche, sigue estos consejos para garantizar la seguridad y comodidad de tu gato:
- Mantén a tu gato dentro del transportín
Nunca permitas que tu gato vaya suelto en el coche. Esto puede ser peligroso tanto para él como para los pasajeros. Usa un transportín bien asegurado con el cinturón de seguridad.
- Evita dejarlo solo en el coche
Nunca dejes a tu gato dentro del coche sin supervisión, especialmente en días calurosos. Las temperaturas pueden subir rápidamente y causar un golpe de calor.
- Realiza paradas estratégicas en viajes largos
Si el viaje dura varias horas, haz paradas para que tu gato pueda beber agua y usar su caja de arena. Algunos gatos se sienten más seguros si permanecen dentro del transportín durante todo el trayecto, así que observa su comportamiento antes de abrirlo.
- Usa feromonas para calmarlo
Rociar el interior del coche y el transportín con feromonas sintéticas (como Feliway) puede ayudar a reducir la ansiedad del gato.
- Mantén el coche con buena ventilación
Evita que el coche se caliente demasiado y asegúrate de que haya suficiente flujo de aire.
Viajar con tu gato en avión
Si viajas en avión con tu gato, infórmate con antelación sobre las políticas de la aerolínea. Algunas permiten que los gatos viajen en la cabina con sus tutores, mientras que otras requieren que vayan en la bodega.
- Revisa las normativas de la aerolínea
Cada aerolínea tiene reglas específicas sobre:
• Tamaño y tipo de transportín permitido.
• Documentación necesaria (certificado veterinario, cartilla de vacunación).
• Costo del transporte de mascotas.
- Usa un transportín aprobado para avión
Si tu gato viajará en cabina, el transportín debe caber debajo del asiento. Opta por modelos cómodos, bien ventilados y seguros.
Reduce el estrés antes del vuelo
• Evita alimentar a tu gato 4 horas antes del viaje para prevenir mareos.
• Usa feromonas o consulta con el veterinario sobre tranquilizantes suaves.
• Mantén la calma, ya que los gatos perciben el estrés de sus tutores.
Si viaja en bodega, toma precauciones adicionales
• Etiqueta el transportín con tu información de contacto.
• Coloca una manta con su olor dentro del transportín.
• Consulta la temperatura de la bodega para asegurarte de que es segura.
¿Y si mi gato se estresa demasiado?
Algunos gatos son más sensibles y pueden estresarse en exceso durante los viajes. Si notas signos de jadeo, vocalización excesiva o temblores, prueba:
• Cubrir el transportín parcialmente para reducir estímulos visuales.
• Hablarle con voz calmada.
• Ofrecer premios o juguetes conocidos para tranquilizarlo.
Si el estrés es extremo, consulta con un veterinario sobre opciones de medicación.
Viajar con un gato a hoteles o casas nuevas
Si te hospedas en un hotel o en casa de otra persona:
• Prepara un espacio seguro para tu gato en una habitación tranquila.
• Lleva su manta o cama habitual para que tenga un olor familiar.
• Déjalo explorar poco a poco, sin presionarlo.
Viajar con un gato no tiene por qué ser una experiencia estresante si tomas las medidas adecuadas. Prepararlo con tiempo, garantizar su seguridad y ofrecerle un ambiente cómodo hará que el viaje sea mucho más tranquilo. Con paciencia y planificación, tu gato puede adaptarse mejor a los trayectos en coche o avión.